B1- CRÍTICA ABSOLUTA A LA GESTIÓN DE ARAMÓN

El Pirineo aragonés, está en clara desventaja en cuanto a infraestructuras invernales en relación a otras zonas de la cordillera.
Esto hecho no tendría en si mayor importancia, sino fuera por la indudable positiva que tienen las estaciones de esquí en la vida y economía de los valles.
Es un hecho constatado, que en los valles que hay estación de esquí, se mantiene la población, hay un buen nivel de vida y una importante actividad económica. No quiero defender con esto el hacer una estación de esquí en cualquier lado, como vereis en otros artículos, para nada esto es así y hay muchos lugares en los que jamás haría un estación invernal.
Pero lo que está claro, que la mayoría de valles que no tienen estaciones de esquí, están cada día más despoblados. Las estaciones de esquí fijan población y favorecen la economía del área circundante, sin embargo los valles sin estaciones se quedan claramente apalancados y agonizan, caminan hacia una muerte lenta pero segura.
Para comprobar todo esto, basta con viajar durante los largos meses invernales, al Pirineo Aragonés y comprobar las claras diferencias entre valles como el de Tena, Canfranc o Benasque que tienen estación de esquí con la comarca del Sobrarbe o los valles de Ansó, Hecho y Aragüés que no tienen estación invernal. En los primeros hay vida, la población crece, se ven niños, cada año se abren nuevos establecimientos comerciales, en definitiva, la vida florece. En los valles si estación de esquí, la población cada día es menor, hay pocos niños, la gente joven se va a las ciudades porque no tienen alternativas, muchos establecimientos hoteleros cerrados por falta de turistas. En definitiva, quedan claramente en desventaja respecto a los valles con estaciones invernales.
Como he empezado diciendo en mi escrito, el Pirineo aragonés está en desventaja con otras zonas de la cordillera en cuanto a infraestructuras invernales. Porque el Pirineo aragonés, hay que compararlo con el catalán, andorrano y francés, no con cordilleras más pequeñas como el Sistema Central o Ibérico o más grandes como los Alpes.
En el Pirineo aragonés, existen 5 estaciones de esquí alpino, Candanchú, Astún, Formigal, Panticosa y Cerler. Tanto si nos comparamos con Cataluña, como con Andorra, como con Francia, estamos en clarísima desventaja.
Empecemos con Cataluña. El Pirineo y Prepirineo catalán consta de 11 estaciones de esquí alpino: Baqueira-Beret, Boí-Taüll, Espot Esquí, Port Ainé, Tavascán, Port del Comte, Rasos de Peguera, La Molina, Masella, Nuria y Vallter 2000.
Este inmenso dominio ampliable, puede ser ampliado a corto plazo con los planes de ampliación de Baqueira-Beret, los de Boí-Taüll, la creación de la nueva estación de Vall Fosca, la posible unión posterior de Vall Fosca con Boí-Taüll o la reapertura de la Tuca.
Personalmente el modelo catalán en el sector nieve me gusta mucho, y es que todas las comarcas catalanes y casi todos los valles del Pirineo, tienen su estación de esquí. Una enormes con más de 100km de pistas como Baqueira-Beret, otras diminutas como Tavascán, pero prácticamente todos los valles tienen su estación con lo que ello significa para su vida y economía.
Por supuesto, en todos los sitios cuecen habas, y en los últimos años, varias estaciones catalanes han tenido problemas financieros. Pero es que claro, una estación como Rasos de Peguera enclavada en el Prepirineo y con una innivación muy deficiente, es normal que tenga todos los problemas del mundo.
Y es normal, que estaciones como Port Ainé o sobretodo Espot, situadas en el Pallars Sobirà, hayan tenido problemas. Y esto es normal, porque es lógico que dos estaciones pequeñas y de innivación irregular puedan sobrevivivir en una misma comarca( Tavascán también está en el Pallars pero es otro concepto) teniendo además a dos gigantes relativamente cercanos como son Baqueira-Beret y las estaciones andorranas. No olvidemos, que ya hace muchos años cerró en esta misma comarca la estación de Llessui.
Pero son casos puntuales, porque en general, Cataluña es el claro líder del mercado español de la nieve y supera aplastantemente a Aragón en cuanto a remontes, kilómetros esquiables, número de estaciones de esquí y visitantes anuales que reciben estas estaciones. Y repito, lo más importante, que todas las comarcas pirenaicas catalanas tienen su estación de esquí.
Si nos comparamos con el Pirineo Francés, aún salimos peor parados. Y es que en el Pirineo galo existen 35 estaciones de esquí alpino, repito sólo en el Pirineo, que en los Alpes por supuesto hay muchísimas más.
Y de nuevo, lo más importante, cada valle tiene su estación de esquí, unas pequeñísimas como Bourg d´Oueil y otras muy grandes como La Mongie-Barèges con sus más de 100km de pistas.
También hay situaciones puntuales de estaciones que han tenido problemas como el caso de Artouste, en este caso por ser una estación que pese a su indudable encanto, es muy pequeña, tiene malos accesos y está cerca de una estación más grande y mejor comunicada como es Gourette.
Pero en cómputo total, en la vertiente gala hay muchas más estaciones que en el Pirineo aragonés, ya que en lado francés lindante con Aragón, hay 15 estaciones de esquí alpino, de nuevo casi todos los valles tienen su estación.
Con Andorra, la diferencia es abismal. En un territorio con una superficie inferior al valle de Benasque, tienen 5 estaciones de esquí alpino, Pas de la Casa-Grau Roig, Soldeu el Tarter, Arinsal, Pal y Ordino-Arcalís.
Las dos primeras estaciones están unidas formando una megaestación llamada Grand Valira, con 193km de pistas, Esta estación en los próximos años, se llegará a unir a la estación francesa de Porté-Puymorens.
Arinsal, Pal y Ordino están unidas comercialmente con la denominación VallNord, aunque sólo las dos primeras están unidas físicamente.
En definitiva, estaciones enormes con remontes modernísimos e inmejorables servicios. Vamos, que de nuevo nos dan mil vueltas.
Cuidado, que no estoy defendiendo para nada el modelo andorrano, urbanísticamente y circulatoriamente, el Principado de Andorra es un caos, lo que no quita para reconocer que su infraesctructura en cuanto a estaciones de deportes de invierno es muy superior.
Para paliar esta situación, para mejorar el posicionamiento del Pirineo aragonés en el sector nieve, se crea en 2002, el holding Aramón.
De hecho, de entre los 10 objetivos que marca, el primero es “Potenciar el sector aragonés de la nieve”, aquí tienen el enlace a su web dónde salen sus 10 objetivos: http://www.aramon.es/asp/objetivos.asp#inicio
El holding lo componen a partes iguales, el Gobierno de Aragón e IBERCAJA. La idea en principio es buenísima, el potenciar el sector de la nieve aragonés a través de las actuaciones de un holding compuesto por la principal caja aragonesa y la DGA o Gobierno aragonés.
En el holding entran las estaciones oscenses de Formigal, Panticosa y Cerler y las turolenses de Valdelinares y Javalambre, quedando fuera de él, Candanchú y Astún.
Repito que la idea es buena, el concepto es el correcto y esto genera una ilusión. Pero pronto la ilusión se convierte en decepción, al observar las nefastas actuaciones de este holding.
Enseguida se les ve el plumero, y pronto se aprecia claramente que Aramón no mira por el bien de los altoaragoneses, y que lo suyo es el ladrillo, grandes recalificaciones y a construir y vender hipotecas.
Realmente, yo enseguida me di cuenta de que Aramón estaba comandado por dirigentes nefastos y su objetivo real no era el potenciar el sector nieve y con ello ayudar a reactivar el Altoaragón.
Todo esto, será más desarrollado en próximos artículos, pero este sería el resumen.
Aramón empezó por dónde no tenía que empezar. Lo justo y correcto hubiera sido que la primera actuación del holding hubiera sido la realización de una estación de esquí en la única comarca que no tiene, el Sobrarbe. Porque está claro que Formigal, Cerler, Panticosa, Valdelinares y Javalambre necesitan remodelaciones y ampliaciones , pero en mi opinión, eran más urgentes actuaciones en zonas que aún no disponen de estaciones de esquí.
Para Aramón, Formigal siempre fue su ojito derecho, Cerler la segunda opción y Panticosa, la oveja negra. Esto es también muy discutible, porque lo que está claro, que por altura, desniveles y posibilidades de ampliación, Cerler siempre había tenido que ser la primera opción, sin duda estamos hablando de la mejor estación aragonesa y la que más posibilidades tiene.
Pero la primera gran actuación de Aramón fue en Formigal. Y que conste que opino que realmente Formigal necesitaba una ampliación y remodelación como agua de mayo, pero reitero que la prioridad en Aragón era una estación en la única comarca altoaragonés sin ella, el Sobrarbe, y que Cerler tenía que haber sido desde el primer momento la estación estrella del grupo, el buque insignia.
Pero Aramón, empezó por dónde no tenía que haber empezado, lo lógico hubiera sido hacer la estación del Sobrarbe que era lo más urgente y después haber remodelado y ampliado Cerler, Formigal y Panticosa.
En el fondo, Aramón como veremos en otros artículos, ha ido a los lugares dónde más posibilidades de desarrollo urbanístico había.
Y empieza con Formigal y anuncia a los cuatro vientos, que va a hacer una maravilla, que van a hacer la mejor estación de los Pirineos y de toda España. Y yo que conozco el monte de Formigal desde crío, sé que eso no es posible, que por sus modestas alturas(hablamos de una zona con cotas máximas esquiables de poco más de 2200 metros, a esa altura comienza el telesilla del Gallinero de Cerler),desniveles y dominio esquiable potencial, Formigal nunca puede llegar a ser la mejor estación de los Pirineos y de España. Y lo dice una persona que tiene especial cariño al Valle de Tena y sus gentes, pero hay que rendirse a la evidencia, y Formigal con una ampliación bien hecha, puede quedarse como una estación bastante divertida, pero jamás puede llegar a discutir el liderato entre las estaciones pirenaicas a Baqueira-Beret, Grand Valira , La Mongie- Barèges o el mismo Cerler si la ampliación de la estación benasquesa se hace como Dios manda.
Pero todo esto que comento, pasa a segundo plano ante la histórica chapuza que hace Aramón en Formigal. Estudios geotécnicos defectuosos, grandes movimientos de tierra, constantes cambios respecto al proyecto inicial.
Como resultado grandes grietas en el monte, deslizamientos de terreno, edificios y puentes que se resquebrajan y la famosa silla de ocho plazas que a bombo y platillo, anuncio Aramón, aún sin poner. Sobre esta silla, hace unos meses nos decían que al final no la pondrían y que al final colocarían una telecabina, sin embargo, el Consejero Delegado de Aramón, Javier Blecua decía recientemente que al final si la pondrían pero con una ubicación algo diferente. En fin, Dios sabe como quedará el tema.
Por supuesto, las pérdidas generadas por esta nefasta actuación han sido cuantiosas. Ello hace que las futuras actuaciones de Aramón en otras estaciones aragonesas, vaya a sufrir importantes recortes y retrasos, vamos que el desastre de Formigal va a lastrar al resto de estaciones del grupo.
Además, la chapuza de Formigal, ha dado alas a los ecologistas, que han cogido más fuerza amparándose en el desastre de Formigal.
El tema es gravísimo, porque no olvidemos que Aramón no es una empresa privada, es una empresa propiedad en un 50% del Gobierno de Aragón, o sea pagada por el dinero de los aragoneses, y nuestros impuestos han sido despilfarrados.
En una empresa normal, se habrían producido dimisiones, ceses y destituciones. Vamos, esto pasa en una empresa privada, y van todos de patitas a la calle. Pero en Aramón no ha ocurrido eso, por supuesto nadie ha dimitido. La única persona que salió del holding fue Eduardo Martínez.
Pero es que en no es sólo lo de Formigal, Aramón no ha dado una a derechas. Aún no ha acometido las inversiones prometidas a las estaciones turolenses, está hundiendo en la miseria a Panticosa, aún no ha empezado la ampliación de Cerler y ni baraja la estación del Sobrarbe.
El tema de Panticosa, clama al cielo y lo explicaré ampliamente en el artículo B23. También estaría el tema de Candanchú y Astún, estaciones que no entran en el holding, y que están luchando contra estaciones financiadas con dinero público. Es normal que en el Valle del Aragón estén que trinen y que Ayuntamientos como el de Canfranc, hayan protestado en numerosas ocasiones públicamente. Sólo ha faltado lo del impuesto ecológico......
Realmente, lo único que ha hecho bien Aramón es poner la telesilla de seis plazas del Rincón del Cielo de Cerler. Y eso fue de rebote, pues en el Plan de actuaciones para la temporada 2005/2006, no se reflejaba la colocación de este remonte. Pero la empresa Leitner, ofreció esta telesilla a Aramón porque le quedaba libre ya que inicialmente iba a una estación de Asia que luego se echó atrás. Repito, de lo poco bueno entre todas la actuaciones de Aramón, y casi fue de casualidad.
Y como he comentado, semejante desastre sobretodo en Formigal, hubiera tenido que dar lugar a dimisiones o destituciones, repito estamos jugando con dinero público. Pero nada de eso, ni siquiera han saltado a la palestra a pedir disculpas.
Por fin, el 30 de marzo del 2006, el Consejero de Industria y Vicepresidente de Aramón, Arturo Aliaga, reconoce los errores en la actuación de Formigal y admite que esos errores está lastrando los proyectos en el resto de estaciones.
Fue en una comparecencia ante la Comisión de Comercio, Turismo e Industria de las Cortes de Aragón, a petición del PP que preguntaba por la falta de inversiones en las dos estaciones turolenses y por la situación de Panticosa.
Arturo Aliaga dijo “En Formigal al principio se corrió demasiado, porque se abrió la estación en canal y después llegaron los estudios geotécnicos”.
Por cierto, esperemos que aclaren eso, por un lado el Consejero Delegado de Aramón dice el 14 de junio del 2005 en una rueda de empresa que Aramón pediría responsabilidades a las empresas que han intervenido en los estudios geotécnicos y comenta “estamos en negociaciones con los responsables para llegar a un acuerdo amistoso, y si no, acudiremos a los tribunales”; y ahora sin embargo Aliaga dice que los estudios geotécnicos llegaron después de abrir la estación en canal.
Luego Aliaga dice “Nunca se actuó con mala voluntad”, hombre, lo que hubiera faltado.....
Comenta que ya se han gastado 85 de los 240 millones de euros previstos en el plan de actuaciones de los años 2004 al 2009.
Está claro, que el desastre de Formigal se ha saldado con grandes pérdidas, y eso puede lastrar los proyectos futuros de otras estaciones del holding.
Como titulaba un diario aragonés, “Los errores de Formigal lastran los proyectos de la nieve”.
Por eso, resultan increíbles declaraciones como las del Presidente de Aramón, Francisco Bono que en una rueda de prensa en junio del 2005 decía respecto al desfase económico del entonces traslado de la silla de seis de Formigal, “Ni a la DGA ni a IBERCAJA les va a suponer un coste adicional, sino que es perfectamente asumible por la propia sociedad”.
Sin comentarios......
En fin, este es el resumen de la lamentable gestión del holding Aramón, en los dos próximos artículos, analizaré las razones del fracaso absoluto de este holding.

MARCO

 

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